Los habitantes del sector de Palmas II expresaron su preocupación por las condiciones de la sede educativa Humberto Tafur Charry, que presenta serios deterioros en su infraestructura y limitaciones para atender a los niños de la comunidad.

En diálogo con este medio, Jennifer Fierro, habitante del sector, manifestó que durante la visita del alcalde a la zona le expuso las principales necesidades de la institución:

“Llegamos a un acuerdo con el alcalde para que realice una visita y conozca de primera mano las problemáticas de la escuela. Esperamos una pronta solución para los niños de la comunidad”, señaló.

Entre las problemáticas más urgentes se destacan el mal estado del cielo raso, baterías sanitarias, lavamanos, pisos y el parque infantil que lleva más de dos años fuera de servicio. A esto se suma la reducción de la jornada escolar a un solo turno, lo que afecta la cobertura educativa en la zona.

La comunidad asegura que, pese a las solicitudes elevadas ante la Secretaría de Educación de Neiva, no han recibido respuestas efectivas. Incluso, denuncian que mientras en redes sociales la administración publica mejoras en otras sedes educativas, la institución de Palmas II ha sido ignorada.

Otro factor de riesgo identificado es la presencia de una grieta en la estructura, frente a la cual, según Fierro, la solución planteada por un ingeniero fue solo pañetar, lo que los habitantes consideran insuficiente:

“Eso sería un pañito de agua tibia. Si esas paredes llegan a venirse abajo, podría ocurrir una tragedia con los niños”, advirtió la vocera comunitaria.

La escuela, construida hace varias décadas por la misma comunidad, carece de columnas estructurales, lo que incrementa la vulnerabilidad del plantel.

Los habitantes esperan que las autoridades locales cumplan los compromisos adquiridos y se priorice la intervención de esta institución educativa, que desde hace años viene funcionando en condiciones precarias.