En muchos hogares colombianos conservar frescas las hierbas y verduras es un verdadero reto, especialmente cuando se compran en grandes cantidades o no se consumen de inmediato. La abuela siempre ha sabido cómo alargarles la vida útil sin necesidad de refrigeradores modernos ni productos costosos. Por eso, sus consejos siguen vigentes y ayudan a evitar el desperdicio de alimentos, a cuidar el bolsillo y a mantener la comida más sabrosa.

Uno de los trucos más antiguos para conservar las hierbas como el cilantro, la albahaca o el perejil, es guardarlas como si fueran flores. Se recomienda cortarles un poco el tallo, colocarlas en un vaso con agua limpia y cubrirlas ligeramente con una bolsa plástica sin apretar. Luego, se pueden dejar en un lugar fresco o dentro de la nevera. Con este método, las hierbas pueden durar varios días más sin marchitarse y conservando su aroma.

Para las verduras de hoja verde, como la espinaca, la lechuga o la acelga, se aconseja lavarlas apenas lleguen del mercado, secarlas muy bien y guardarlas envueltas en un periódico o servilletas dentro de una bolsa plástica. La clave está en evitar que se humedezcan demasiado o que queden apretadas, ya que eso acelera su descomposición. Si se almacenan de esta forma en el refrigerador es posible mantenerlas frescas por una semana o más.

Las verduras como la zanahoria, el apio o el pepino también tienen su truco. En lugar de dejarlas sueltas en el cajón del refrigerador, se pueden guardar dentro de recipientes herméticos con un poco de agua, cambiándola cada dos días. Esto ayuda a que no se sequen ni se marchiten tan rápido y también se recomienda cortar algunas verduras y congelarlas en porciones listas para cocinar.

Estos consejos, transmitidos de generación en generación, no solo son efectivos, sino que también son una forma de honrar la sabiduría cotidiana que nace de la experiencia. Con ellos, es posible reducir el desperdicio, cuidar la economía del hogar y garantizar que las comidas sigan teniendo ese sabor fresco y natural que tanto gusta en la cocina.